martes, 31 de julio de 2007

Historias de Kraëtoria: Theodorus Graco

El consejero del rey y Gran Maestre de la Orden Púrpura Imperial, Theodorus Graco, es un poderoso hechicero envuelto en un halo de misterio y leyenda. Ni siquiera su nombre real ha podido comprobarse.

En la corte florentina corren muchos rumores acerca de su nombre de nacimiento, que podría ser “Virgilio Aemictus”, “Iván Dragore” (lo que vincularía su origen con el antiguo reino de Valacchia) o “Ethos”.
Su edad también es un misterio. Aunque existen crónicas históricas que lo mencionan como consejero del rey Lucius VI, abuelo del actual emperador Lucius VII —lo que significaría que Theodorus tiene al menos 280 años—, las opiniones sobre estos hechos son muy discutidas. Por un lado, los escépticos sostienen que Theodorus es simplemente un seudónimo adoptado por la línea de ascendientes del actual hechicero real (lo que significaría que el actual Theodorus tendría sólo la edad que aparenta), mientras que otros, guiados por los detallados relatos de la época, sostienen que el Theodorus de hoy es el mismo que lideraba la Sexta Tribuna del rey Lucius VI hace casi trescientos años.
Más aún, algunos afirman que Theodorus llevaba una vida aventurera durante los Trece Siglos Oscuros y que había viajado mucho por el mundo antes de asentarse definitivamente en Florencia. Si se aceptaran estas ideas, el Theodorus que hoy aconseja a Lucius VII tendría 300, o incluso 400 años.
Como los rumores siempre superan en impacto a los hechos comprobados, los florentinos tienden a aceptar que su héroe y protector es un semidiós, probablemente hijo de Atenea, lo que no resulta del agrado de los sacerdotes florentinos, que intentan erradicar los cultos paganos y la creencia en los “semidioses”.
Para el pueblo florentino, Theodorus es una leyenda viva. Sus proezas como Sexto Tribuno en las guerras cimbrias son cantares de gesta populares entre los juglares florentinos. Theodorus fue el primer hechicero aceptado formalmente en la legión florentina y el primero en formar una tribuna (la Sexta Tribuna de la legión) integrada casi exclusivamente por conjuradores arcanos.
Theodorus lideró la resistencia florentina durante el sitio de los salacios a Siracusa el 2796. Los cantos populares cuentan que el hechicero, al mando de los 400 sobrevivientes de la Tercera y Sexta Tribuna (que habían sido ferozmente masacrados mientras defendían las costas de la marina salacia) consiguió derrotar a los 6 mil soldados salacios y rescatar a unos 2 mil civiles siracusos que habían escapado de las llamas y el hambre.
Cantos aún más antiguos relatan que Theodorus ayudó a Lucius Antíoco, el Viejo, a recuperar el trono de Florencia de manos de Augustus V el usurpador. En la legendaria batalla de los campos del Varano (2726 D.C.), Theodorus y Lucius Antíoco derrotaron el ejército de Augustus bajo las mismas murallas de Florencia en una victoria pírrica. Cuenta los cantares que el pueblo de Florencia, cansado de los abusos de la dinastía augustina, se unió a los invasores y Augustus fue desterrado. Se dice que pasó sus últimos años en una isla del mar Románico. Lucius Antíoco, por su parte, fue coronado rey de Florencia y adoptó el nombre de Lucius VI, en honor a su antepasado Lucius V, derrocado por el golpe militar de Augustus I hacía doscientos años, hacia el final de los Trece Siglos Oscuros.
Fuera de los cantares de gesta, el hechicero Theodorus es visto por el pueblo como el hombre que erradicó la magia negra y el héroe de las batallas que mantienen Florencia fuera de peligro. Durante la era de Lucius VII, Theodorus persiguió a las brujas, expulsó a los elfos e inventó armas poderosas que ayudarían al imperio a defenderse de sus poderosos enemigos: la pólvora y, recientemente, las armaduras sardianas.
Por su parte, Lucius VII es un emperador bondadoso que ha elevado el nivel de vida de los florentinos y ha conseguido integrar sus conquistas en forma pacífica. Actualmente, tanto los valacchianos como los mauryanos se sienten orgullosos de pertenecer al imperio y desean que la prosperidad de éste se amplíe con la conquista de Gallen y los Montes del Yunque. Sin embargo, no es un secreto que el emperador desea integrar a los elfos en forma pacífica, tal como lo hizo con Valacchia, y esto es algo que no le agrada a los florentinos, que no tolerarían la idea de que los elfos se convirtieran en ciudadanos florentinos.
Theodorus, a la cabeza de la legión florentina, sigue siendo visto como un héroe, a tal punto que sus hazañas han opacado las del viejo Lucius VII. Es cierto que el emperador es un hombre amado y respetado por sus súbditos (muchos consideran que su larga vida se debe a que es un hijo de Zeus), pero desde aquel lejano intento de asesinato que el anciano no ha salido de su palacio ni ha dirigido la legión, como lo hizo durante los primeros años de la guerra élfica. Además, la ausencia de sucesores directos es una sombra sobre el palacio de Rómulo, sede del poder imperial.
¿Qué ocurrirá cuando finalmente fallezca Lucius VII, el Magno? Muchos especulan que el trono debería recaer en la línea de los Antíoco, descendientes de Lucius VI el viejo y parientes lejanos de Lucius VII. Sin embargo, estos nobles han estado alejados tanto tiempo del poder que el senado florentino teme las consecuencias de dicha intromisión. Además, existen resquemores entre la nobleza a los Antíoco, ya que se rumorea que el actual patriarca de la casa de los Antíoco, Ovidio de Milano, tiene sangre élfica.
Aunque esto no fuera cierto, la popularidad de Theodorus entre los nobles florentinos y el mismo pueblo lo hacen un candidato demasiado posible para el trono de Florencia luego de la muerte de Lucius VII... claro, si se considera que el hechicero le sobrevivirá. El problema es que al senado esta idea no le agrada: nunca ha habido un rey mago en Florencia y existe un creciente temor a Theodorus entre los senadores. ¿Intentaría reemplazarlos por magos de la Orden Púrpura? ¿Qué oscuros poderes ha alcanzado este hechicero y qué estaría dispuesto a arriesgar para aumentarlos?
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